04/11/2011 - Puede que muchos y muchas al ver esta foto se pregunten que hizó está mujer
para que participando en una carrera se le echaran encima varios corredores de
esta forma. Pues bien, no son los corredores los que se le echan encima, sino
un juez que intenta sacarla de la prueba. ¿Y por que? Para responder a esto
habría que situarse en la época.
En 1966 en el maratón de Boston una corredora Roberta Gibb toma la salida
extraoficialmente ya que en esta prueba no permitían la participación de
mujeres. Tendrían que pasar otros cinco años para ello. Pero Roberta logró
terminarlo en un tiempo de 3:21:00, una marca nada despreciable que aun hoy en
día muchos hombres no logran alcanzar.
Un año después Roberta Gibb vuelve a participar por su cuenta pero la que si
logra hacerlo de forma oficial es una corredora llamada Kathrine Switzer que
desafiando a las normas discriminatorias de la época engaña a la organización
inscribiéndose con el nombre de K.V. Switzer. Aunque el engaño solo duró hasta
que a mitad del recorrido la vio un juez que salió tras ella para detenerla y
sacarla de la carrera. Con lo que no contaba la organización es con que los
corredores que en ese momento iban alrededor de Katherine iban a apoyarla
deteniendo al juez y acompañándola durante el resto de la prueba para que
pudiera completarla en un tiempo de 4 horas 20 minutos. Así es como Katherine Switzer
pasó a la historia como la primera mujer en participar oficialmente y completar
el Maratón de Boston en 1967.
Las fotos
de su hazaña dieron la vuelta al mundo pero desgraciadamente la Federación Estadounidense
de Atletismo la suspendió por varios motivos: competir en una prueba masculina,
completar una distancia prohibida para las mujeres e inscribirse ilegalmente en
una carrera. Sin embargo, el esfuerzo de esta corredora, así como el de Roberta
Gibb y otras muchas mujeres que plantaron cara a las normas discriminatorias de
la época, no fueron en vano pues en 1971 el maratón de Nueva York incluyó de
forma oficial la participación de mujeres, y un año después el maratón de
Boston. Los Juegos Olímpicos tardaron bastante más en incluir el maratón
femenino como prueba olímpica, no fue hasta la edición de 1984.
Como méritos deportivos, Katherine Switzer consiguió
participar en 35 maratones, ganando entre ellos el de Nueva York en 1974 y
logrando su mejor marca, 2:51:33 en la edición de 1975 de Boston. Tiempo que la
sitúa en la sexta posición como mejor marca femenina del mundo.
Kathrine
Switzer ha luchado contra la desigualdad entre hombres y mujeres en el plano
deportivo y fuera de él, ha organizado carreras en 27 países, en las que
participaron más de 1 millón de mujeres, trabajado de comentarista deportiva y
escrito el libro “Marathon Woman”. Sin duda toda una labor y una carrera que ha
contribuido a que la mujer esté más presente en el mundo del deporte y del
maratón en particular.
Como anécdota queda esta foto que se hicieron Katherine y el juez de carrera que trató de expulsarla, cinco años después.